¿Te has mirado últimamente en el espejo y te has dado cuenta de que tus dientes se han vuelto un poco más amarillos? Si además de ello estás experimentando una sensación molesta cuando tomas bebidas muy frías o muy calientes, es probable que padezcas problemas de erosión dental.

 ¡Pero que no cunda el pánico! Lo más importante es que entiendas cómo has llegado a esta situación para prevenirla en el futuro y que después comprendas cómo puedes devolverle a tus dientes su salud habitual.

 

¿Qué es la erosión dental?

La erosión dental es un tipo de desgaste que sufren tus dientes por el efecto de agentes químicos. Aunque por su nombre suena muy espectacular, la realidad es que muchos de estos agentes se encuentran dentro de nuestro propio cuerpo. A base de entrar en contacto una y otra vez con tus dientes, generan un desgaste. Pero como te decíamos más arriba, es posible evitarlo y revertirlo.

¡No los confundas! Diferencias entre erosión y abrasión dental

Como decía la canción, la erosión y abrasión dental son tan parecidos, pero tan diferentes. Aunque las consecuencias son parecidas, los causantes difieren. Mientras que en la erosión ya te hemos contado que se trataba de agentes químicos, en el caso de la abrasión es un agente mecánico.

Es decir, un impacto físico repetido en el tiempo. Muchas veces es el propio cepillo de dientes, cuando es demasiado duro, el que produce este daño. Otra causa muy habitual es el bruxismo.

Ahora que conoces la diferencia, continuamos. Si quieres que te traigamos un post sobre abrasión dental, déjanoslo en los comentarios.

¿Es peligrosa la erosión dental?

 Como te puedes imaginar, la erosión dental es un proceso común que se produce día a día en tus dientes. Así que lo primero que tienes que entender es que no es peligrosa. Sin embargo, cuando se está fuera de control y actúa en unas condiciones que la llevan al extremo empieza a afectar al esmalte del diente.

El color blanquecino se transforma en amarillento y esa es la primera señal de que tenemos que tomar cartas en el asunto. 

Síntomas de la erosión dental: ¡atento a estas pistas!

Si has notado alguno de los siguientes síntomas, te animamos a que te pongas en contacto con tu dentista. ¡Cuanto antes actúes, más fácil será revertir sus efectos!

  • Decoración de los dientes. La erosión dental daña el esmalte y lleva el blanco natural a un tono amarillento.
  • Sensibilidad dental. Los dientes se vuelven mucho más sensibles a los agentes externos. Por eso las bebidas frías y calientes se vuelven tan molestas.
  • Desgaste de las piezas dentales. Los dientes pueden cambiar de forma, redondearse e, incluso, experimentar pequeñas fisuras. También pueden aparecer transparencias.

 

¿Cuáles son las causas de la erosión dental?

Si has experimentado alguna de las sensaciones que te hemos contado hasta ahora, seguro que quieres conocer por qué estás padeciendo esta situación de erosión dental. La erosión dental se produce en un paciente por causa de agentes propios o externos del organismo.

De hecho, es precisamente este origen lo que lleva a clasificar las dos potenciales situaciones:

  • Erosión dental intrínseca. Son agentes propios del cuerpo los que generan esta situación. Son muy comunes en personas que padecen problemas estomacales o de alimentación.
  • Erosión dental extrínseca. Existen determinados alimentos y medicamentos que pueden derivar en ella. Entre ellos los suplementos de Vitaminca C masticables y una dieta excesiva de azúcar.

Pero ¿cómo te puedes enfrentar a ella?

El mejor tratamiento contra la erosión dental 

Si has identificado los primeros síntomas de erosión dental, lo mejor es que acudas a tu odontólogo de confianza. Cada caso es un mundo y también dependerá de lo avanzado de la situación. Por eso es imprescindible que te vea para desarrollar ese camino que recupere la salud de tus dientes.

  • Erosión dental inicial. Si la situación es leve, el dentista recomendará una serie de medidas preventivas que conseguirán que la dolencia no vaya más allá.
  • Erosión dental moderada. La mejor forma de tratarlo es mediante una intervención llamada obturación con composite que ayudará a recuperar el grosor del esmalte de forma localizada.
  • Erosión dental severa. La mejor elección es la reconstrucción de las piezas dentales que estén afectadas.

No obstante, en la mayoría de las situaciones los pacientes acuden a los dentistas con una situación leve. De hecho, si vas al dentista una o dos veces al año de manera rutinaria, será suficiente para identificar este problema cuando comience a producirse.

Como se suele decir… ¡Mejor prevenir que curar!

Si has llegado hasta aquí por curiosidad y tú no padeces una afección de erosión dental, te animamos a que desde hoy te tomes mucho más en serio su prevención.

  • Mantén una higiene dental sana.
  • Aliméntate de forma saludable.
  • Acude al dentista de forma periódica.

Si sigues estos tres consejos evitarás muchos de los problemas que pueden surgir de manera natural. Y si sientes que ya estás padeciendo los primeros síntomas, una visita al dentista te evitará muchos problemas mayores.