Muchas personas se dejan este paso porque no les han enseñado que se trata de un paso fundamental.
Tu lengua es una portadora de bacterias muy grande.
Piensa que no es un lugar plano, sino que tiene diferentes surcos donde se puede quedar incrustada la comida y ayudar a que aparezcan las bacterias.
Sin una correcta limpieza de la lengua con un limpiador lingual o cepillo lingual, estás empujando a tu boca a contraer enfermedades como las caries, la gingivitis y la periodontitis, así como al mal aliento.
A lo largo de este artículo te queremos hablar de los limpiadores linguales y de cómo pueden ayudarte con la higiene de tu boca.
¿Qué es un limpiador lingual?
Lo primero es lo primero. Te hemos dicho que necesitas un limpiador lingual, pero, ¿qué es exactamente un limpiador lingual?
También recibe el nombre de raspador lingual y es una herramienta sencillísima de utilizar que encuentras fabricado en plástico, pero también puedes encontrar algún limpiador lingual de acero inoxidable.
Como es un producto creado específicamente para limpiar la superficie de la lengua después del cepillado, es lo más recomendado que debes utilizar para evitar las enfermedades más comunes que se pueden acumular en ella.
¿Por qué utilizar un limpiador lingual?
A lo mejor te estás preguntando, ¿para qué voy a utilizar un limpiador lingual si puedo usar mi cepillo de dientes?
Científicamente se ha demostrado que un raspador lingual es mucho más efectivo para reducir las bacterias de la boca y combatir la halitosis.
¿Por qué?
Porque, como te hemos mencionado en el apartado anterior, está específicamente diseñado para limpiar correctamente esa parte específica de la boca.
Al igual que los cepillos de dientes están hechos para los dientes.
Existen algunos limpiadores linguales que cuentan con dos caras para facilitar la tarea: un perfil ondulado para adaptarse a la depresión central de la lengua y la otra lista para limpiar los laterales de manera óptima.
Por lo que, la limpieza no se basa únicamente en frotar la lengua y dejarla como nueva, porque para eso tendríamos el cepillo.
Es, más bien, para rasparla y poder arrastrar las bacterias y los restos de comida fuera de la boca.
¿Cómo usar el limpiador lingual?
El limpiador lingual no es difícil de utilizar, pero hay que tener en cuenta cómo utilizarlo si quieres obtener resultados.
Es decir, al igual que el cepillado de dientes, tendrás que utilizarlo todos los días para eliminar el mal aliento y las bacterias de la lengua.
Y no, no te costará apenas tiempo, mira:
- Tienes que colocarte delante del espejo y sacar la lengua.
- Introducir el raspador en la boca y comenzar la limpieza por la parte central de la lengua.
- Continuar con la parte más lejana y teniendo especial cuidado con este paso porque debe ser prograsivo.
- No lleves muy atrás el raspador para evitar arcadas.
- Arrastra el limpiador desde la parte más lejana hacia delante de la lengua.
- Repítelo en varias ocasiones.
- Aclara el limpiador con agua después de cada pasada.
- Enjuaga el limpiador con agua y jabón y guárdalo hasta el próximo uso.
No era tan difícil, ¿verdad?
¿Puedo utilizar un cepillo con limpiador lingual?
¿El cepillo lingual no es lo tuyo? Entendemos que a veces puede dar un poco de respeto, sobre todo al principio.
Es por ello que puedes optar por la opción de cepillos de dientes manuales que incorporan su propio raspador en el cabezal.
Pero ten en cuenta que siempre deberás usar la parte pensada para la lengua y no las cerdas.
¿El problema que tiene esta alternativa? Que al ser más pequeños que un raspador lingual, seguramente tengas que dedicarle un poco más de tiempo.
Y, por supuesto, no te olvides de enjuagarlo muy bien para evitar que las bacterias se acumulen y eviten que tu lengua se limpie correctamente.
¿Dónde puedo comprar un raspador de lengua?
Lo mejor de todo es que se trata de un utensilio tan común en la higiene bucal que puedes encontrarlo en diferentes establecimientos.
Desde farmacias, supermercados hasta tiendas online donde encuentras alternativas libres de plásticos como los hechos con cobre.
Pero si tienes alguna duda acerca de cuál sería el mejor, siempre puedes reservar una cita con nosotros en Clínica Dental Plata en Alcorcón y estaremos encantados de asesorarte al respecto.
En cuanto al precio no suele ser demasiado caro, alrededor de los 3 o 4 euros los de plástico y hasta 6 los que son de materiales más sostenibles.
¿Su ventaja principal? No tienes que cambiarlo cada pocos meses, porque si lo limpias correctamente después de cada uso, puede durarte años.