Tener una sonrisa perfecta no siempre es fácil de conseguir. En algunas ocasiones, por mucho que cuidemos nuestra salud bucodental, existen ciertos aspectos que impiden que tengamos la boca que deseamos al 100 %.

Hoy te hablamos de la maloclusión dental, cuántas clases existen y cómo se trata. Vamos a ello.

¿Qué es la maloclusión dental?

Aunque tenga una denominación un poco complicada, es mucho más sencilla de entender. La maloclusión dental no es otra cosa que la incorrecta alineación de los dientes. Es decir, cuando el tamaño entra mandíbulas o entre mandíbula y diente es diferente.

Y existen diferentes tipos de maloclusión dental que pueden afectar a tu dentadura.

¿Cuántas clases de maloclusión dental hay?

Existen unas 7 clases diferentes de maloclusiones que se dividen en tres grandes grupos en función del plano en el que se produzca el problema.

Es decir, las dividimos en plano vertical, transversal y sagital. ¿Las vemos una a una?

Plano vertical

Dentro del plano vertical, nos encontramos con la mordida profunda o sobremordida y con la mordida abierta:

  • La mordida profunda o sobremordida se da cuando los dientes superiores sobrepasan en exceso a los inferiores y se relaciona normalmente con el bruxismo.
  • La mordida abierta, sin embargo, se da cuando existe un espacio entre ambas arcadas. Es decir, entre las dos mandíbulas al morder. Suele estar influida por hábitos poco recomendables como chuparse el dedo y trae problemas de masticación, pronunciación y respiración.

Plano transversal

Con el plano transversal tenemos dos tipos más de mordidas: la cruzada y la de tijera.

  • La mordida cruzada se da cuando la mandíbula superior muerde por dentro de los dientes inferiores. Y si no se corrige, traerá problemas dentales, musculares, óseos o articulares a largo plazo.
  • Con la mordida de tijera ocurre justo lo contrario. En este caso la mandíbula superior sobresale demasiado por fuera de los dientes inferiores.

Plano Sagital

Y dentro del plano sagital, tenemos tres tipos de clases de maloclusiones: la de clase I, la clase II y la clase III.

Las maloclusiones de Clase I aparecen cuando la relación entre los molares y la guía canina es la normal, pero ocurre una malposición de una o varias piezas dentarias como el apiñamiento o el diastemas.

Las de Clase II se producen cuando el maxilar está excesivamente avanzado o todo lo contrario: la mandíbula está retrasada o poco adelantada.

En las de Clase III, la mandíbula se encuentra más avanzada que el maxilar y es la clase que más afecta a la estética facial.

¿Cuáles son los síntomas de la maloclusión dental?

Como te puedes imaginar, el síntoma principal es que tengas los dientes desviados, apiñados o que sobresalgan de alguna manera.

Aunque también puedes notar otros síntomas menos evidentes como, por ejemplo:

  • Dolor al masticar
  • Molestia habitual en los músculos faciales o en la mandíbula.
  • Respirar por la boca sin cerrar los labios.
  • Morderse las mejillas de forma frecuente.

¿Cuáles son las causas de la maloclusión dental?

Nos encantaría decirte que solo existe una causa por la que aparece la maloclusión dental, porque la realidad es que hay diferentes. Por ejemplo, las más comunes son de carácter genético o ambiental.

Pero existen otras como:

  • La pérdida de los dientes.
  • Respirar por la boca.
  • Chuparse el dedo.
  • Usar biberón o chupete durante un tiempo excesivo.
  • Los dientes de leche en niños ocupan poco espacio y cuando crecen, los dientes definitivos ocupan más espacio del que disponen.

¿Cómo se previene la maloclusión dental?

Lo más importante para prevenir la maloclusión dental es evitar los malos hábitos como el uso excesivo del chupete o del biberón, respirar por la boca o chuparse el dedo.

Sobre todo para evitar la maloclusión dental infantil. Además, también deberías tener en cuenta estos factores:

  • La alimentación. Evita que tu hijo tenga demasiada dieta blanda cuando ya es capaz de masticar alimentos duros.
  • Las caries dentales y fracturas. Tener unos tejidos sanos desde niño evitando enfermedades gracias a un buen hábito de higiene oral es indispensable para prevenirla desde la infancia.
  • Mantener el espacio de la arcada. Si se pierde algún diente de manera antinatural, se deberían utilizar mantenedores de espacio para que sigan teniendo su hueco natural.
  • Bruxismo. Hay que vigilar y revertir el hábito de apretar o rechinar los dientes.

Y una vez que ya tenemos claro qué debes hacer para prevenir, es el momento de averiguar cómo se trata.

¿Cómo se trata la maloclusión dental?

La única manera de tratar la maloclusión dental es gracias a los aparatos fijos o removibles. Gracias a ellos será posible corregir la alineación de los dientes y la posición de la mandíbula.

Sin embargo, en niños y adolescentes también se puede recurrir a la extracción de algunos dientes de leche para dejar espacio a los definitivos.

Por suerte en la época infantil es mucho más fácil de corregir ya que el crecimiento óseo sigue en etapa de desarrollo, en cambio, en la edad adulta es importante utilizar una ortodoncia para alinear los dientes, pero la posición de los maxilares solo se puede modificar con cirugía.

Si quieres que revisemos tu caso de maloclusión dental en Alcorcón, puedes reservar tu cita en Clínica Dental Plata y te daremos un diagnóstico personal para averiguar la mejor manera de tratarlo.