Tu sonrisa se merece estar perfecta, pero sobre todo se merece estar cuidada. Por eso es imprescindible que conozcas los efectos que tienen ciertos antibióticos que recetamos los especialistas.
Y, al igual que ocurre con otro tipo de medicamentos, con los que están relacionados con tu salud dental tampoco puedes automedicarte. En muchas ocasiones, seguro que has conocido a alguien que decía que, ante el dolor de muela, se tomaba un antibiótico.
Pero como el propio nombre indica, un antibiótico se encarga de combatir las infecciones bacterianas, por lo que su uso sin control y de manera excesiva, puede desencadenar problemas de inmunización ante su consumo. O, lo que es lo mismo, que no te hagan ningún efecto en el futuro.
A lo largo de este artículo te hablaremos del Rhodogil, uno de los medicamentos más comunes ante este tipo de infecciones. ¿Lo vemos?
Rhodogil: el antibiótico para infecciones bucales más utilizado
Hay muchas probabilidades que al acudir a tu dentista con una infección dental te haya recetado utilizar Rhodogil. Pero, ¿exactamente para qué sirve?
Es antibiótico para tratar la infección dental como puede ser una patología periodontal. Su consumo debe ser moderado, al igual que ocurre con el resto de medicamentos. Por eso solo debe recetarlo un especialista en salud bucodental. Este antibiótico solo es efectivo para tratar la infección bucal, por eso aunque tengas Rhodogil en casa de alguna otra ocasión, jamás debes automedicarte.
Cuando te duela alguna parte de la boca, ya sea por encías inflamadas, llagas u otras patologías orales, es imprescindible que acudas a tu clínica dental y averigües qué está ocurriendo ahí. Si no sufres una infección bucal y te administras un antibiótico, el dolor persistirá y tu cuerpo no agradecerá para nada la medicación.
¿Cómo se usa el Rhodogil en odontología?
Cada dentista es diferente, pero lo que está claro es que la ingesta de antibióticos debe realizarse únicamente en situaciones muy concretas. Los profesionales de Clínica Dental Plata tratamos a cada paciente por separado y nos ceñimos a tu situación para tratar las infecciones y que no causen más daños en tu boca.
Si quieres conocer algunas de las enfermedades que pueden ir asociadas a un antibiótico para la boca, sigue leyendo:
- Enfermedades periodontales
- Abscesos dentales
- Caries profundas
- Cirugía oral y maxilofacial
¿Las vemos en profundidad?
Enfermedades periodontales
Algunas patologías dentales vienen por culpa de la presencia de bacterias en la boca que pueden generar daños graves en la estructura de tu boca. Lo que ocurre con este tipo de enfermedades es que las bacterias colonizan los tejidos del periodonto para dañarlos sin piedad.
¿Cómo se evitan estas situaciones? Acudiendo al dentista de manera regular y llevando una higiene bucodental correcta que te permita mantener los dientes limpios.
Abscesos dentales
Los abscesos dentales, más conocidos como flemones, aparecen por la acumulación de pus en las mucosas orales. Y este pus se forma por las bacterias orales que no se han eliminado eficazmente.
En este caso, el uso de un antibiótico para la infección de boca como el Rhodogil permite que se frene la infección bucal.
Caries profundas
Las caries en sí, son enfermedades que aparecen por la presencia de bacterias y están muy relacionadas con la falta de higiene bucodental. Si la caries es leve, el problema se solventa con un empaste dental, pero, claro, cuando se trata de una caries profunda, el procedimiento es otro.
En estos casos se puede haber dañado la pulpa dental, por ello, un antibiótico para infección bucal junto con una endodoncia es el mejor tratamiento posible.
Cirugía oral y maxilofacial
El uso de un antibiótico para la infección dental se puede utilizar para prevenir infecciones ocasionadas por bacterias. Por ello es normal que se recete Rhodogil en casos de intervenciones de cirugía oral, como las exodoncias complejas de las muelas del juicio o cordales.
El antibiótico de forma preventiva en este caso nos asegura que tras la intervención, las bacterias no puedan provocar daños en las estructuras orales.
¿Cuáles son las contraindicaciones del Rhodogil?
Al igual que ocurre en otros antibióticos, el Rhodogil también debe evitarse en ciertas situaciones como, por ejemplo: las personas que sufren problemas en el hígado. Aunque tampoco pueden ingerirlo las personas intolerantes a la fructosa ni las embarazadas. Además, jamás se debe tomar un tratamiento de antibióticos con bebidas alcohólicas.
Por ello, si crees que necesitas un antibiótico para tu boca, pide cita con nuestro equipo de profesionales en Clínica Dental Plata, en Alcorcón, para asegurarnos de que tu problema bucodental necesite su uso o con otro tratamiento estaría solucionado.